Las condiciones en 2018 permiten prever una mejor dinámica en el mercado de vivienda por cuenta de una tendencia más favorable de la inflación, las tasas de referencia y el crédito hipotecario.
En el marco de la Asamblea Anual de Afiliados de la regional Cúcuta & Nororiente se evidenció el potencial y las oportunidades de crecimiento que tiene el Norte de Santander, que durante el 2017 comercializó 2.655 unidades de vivienda nueva y licenció la construcción de 357.516 m2, un volumen que representó un aumento de 9,4% respecto a 2016. El 63,7% del área licenciada se destinó para la construcción de proyectos No VIS.
La presidente de Camacol, Sandra Forero Ramírez, señaló que “el diagnóstico del mercado de vivienda es positivo debido, en gran medida, a los programas que promueve el Gobierno Nacional en todo el país, en los estratos medios y bajos de la población”.
Además, afirmó que durante 2017 los desembolsos hipotecarios en Norte de Santander ascendieron a cerca de $206,5 mil millones lo que se traduce en un crecimiento real de 6,2% anual.
Para este año, la proyección de Camacol a nivel nacional es alcanzar una tasa de crecimiento del PIB sectorial de 4,6%. En ventas de vivienda nueva, la perspectiva es llegar a 179.500 unidades durante 2018, es decir un 4% más que en 2017, que se atribuye a la continuidad del buen desempeño de la vivienda social y la recuperación del mercado en el segmento medio.
“Desde finales de 2017 se vienen presentando señales de recuperación del mercado de vivienda que obedecen a una tendencia más favorable de la inflación, las tasas de referencia y el crédito hipotecario. También, la percepción ha venido recuperándose en todas las ciudades de manera sostenida, por lo que las condiciones en 2018 permiten prever una mejor dinámica”, argumenta la Directiva del Gremio.
Sin embargo, “la inseguridad jurídica en el sector puede minar el clima de confianza y las expectativas de recuperación. Su impacto se percibe como altamente nocivo para el desarrollo de los proyectos y no hay espuestas claras en los diferentes niveles de gobierno, instituciones competentes y organismos de control. Frente a esto, se requieren acciones concretas e inmediatas, y precedentes claros y contundentes que brinden estabilidad para la inversión de las empresas y de los hogares en torno a los proyectos de construcción”, dice Sandra Forero Ramírez.
A propósito de ello, el Gremio alista sus propuestas para el próximo Gobierno 2018-2022, que se enmarcan en cuatro pilares fundamentales: el acceso a la vivienda formal, la promoción de proyectos de construcción y seguridad jurídica, la construcción de ciudades de calidad y el impulso a la productividad sectorial.