Los bosques: Base del bienestar humano

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Publicado: Mié, 15/06/2016 - 16:00

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Los bosques: Base del bienestar humano

No solo hay que pensar en la conservación de estos ecosistemas terrestres, sino en las millones de vidas que dependen de ellos.

Resultan alarmantes las cifras de deforestación que se están viendo a nivel mundial. El ser humano no tiene en cuenta los servicios ecosistémicos que los bosques nos prestan a la humanidad, poniendo muchas veces en un primer plano la demanda de otros bienes que requieren de su tala como la ganadería, la construcción de carreteras, la minería y explotación de hidrocarburos e, incluso, la misma producción de alimento cuando se hace agricultura a gran escala.

Sin embargo, detrás de estos grandes bosques no sólo está la vida de la flora y la fauna, sino la de 300 millones de personas que viven en ellos y la de diez millones de personas que trabajan en proyectos relacionados con su conservación, según el Informe Bosques Vivos de WWF.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la madera de los bosques es la principal fuente de energía para 2 mil millones de personas en países en desarrollo, y a partir de estimaciones realizadas por WWF, se cree que el material genético que carga la biodiversidad representa 320 mil millones de dólares para el mercado farmacéutico.

‘Bosques Vivos’ predice que entre el 2010 y el 2030 sólo en los once nodos de mayor deforestación a nivel mundial se perderán 170 millones de hectáreas de bosques, de los que 26,48 millones de hectáreas corresponden a áreas cercanas a Colombia (23,48 millones en toda la región amazónica y tres millones en la ecorregión Chocó-Darien).

Cifras que resultan tan desalentadoras como las que dio el Ideam en su último reporte, donde se identificó que entre el año 2014 y el 2013 la deforestación aumentó 16 %. Y aunque la Amazonia fue la región que más redujo la tala de bosque, sigue liderando la mayor tasa de deforestación.

Por otro lado, Colombia dentro de uno de sus grandes compromisos internacionales, se puso la meta de deforestación neta cero en la Amazonia para el año 2020, con lo cual busca dejar de emitir 44 megatoneladas de GEI a la atmósfera y frenar la expansión de la frontera agropecuaria a través de la reconversión de estas prácticas por unas que sean más productivas y sostenibles.

Pero el reto no es tan fácil, ya que al mismo tiempo debemos pensar como erradicar el hambre y la pobreza. Entonces, ¿a qué le damos prioridad?

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